Frio...

Amanece, y las primeras luces de la mañana se mezclan con el sonido del mar, enaltecido por la brisa... la misma brisa que inunda la habitación y fluye rauda sobre tu cama...

Desnuda te estremeces...
Me fascina verte dormida y desnuda.
Me fascina el aroma de tu piel por la mañana.... libre, pleno...
A escasos centimetros de tí, me inundo con el olor, tu olor, que impregna cada uno de tus pliegues, de cada uno rincones.... cada atomo de ti...

Tu nuca, tus pómulos, tus orejas.... las aureolas de tus senos, aun oliendo a mis besos... tu vientre... donde me adormecí tras inundarte con mi placer.... tus otros labios, donde el aroma comparte restos de ti, de mi.... y de los dos.

La brisa es fria.... pero el calor inunda mis riñones mientras observo el contorno de tu sexo, que mis dedos dibujan de memoria una vez más para mi... Tu piel se agita.

Hace frio.... pero el volcan de mi deseo necesita beber de ti, y mis labios se funden con los tuyos y mi lengua recorre cada pliegue hasta encontrarte... 

El sol avanza lentamente y derrama su calor en la habitación.... en el mismo instante que inundas mi boca con tu sabor y yo... inundo la tuya con mi pasión....